Les presento aquí algunas de las ventajas que obtiene un cliente (y el traductor) al trabajar directamente con un traductor autónomo.
Espero que les sirvan a la hora de presentar sus ofertas y argumentar el trabajo de los profesionales independientes.
Ventaja n°1: No existen los intermediarios
La falta de comunicación entre los participantes de un proyecto es a menudo un problema muy importante. En general, esta mala comunicación se debe al hecho de que el cliente debe tratar con diferentes personas intermediarias.
Sin embargo, al tratar directamente con un traductor autónomo, usted está hablando directamente con la persona a cargo de su proyecto. Esta comunicación directa asegura el control y la comprensión completa de todos los aspectos del documento.
Ventaja n°2: Coherencia
Cuando se trabaja con una agencia las posibilidades de que el cliente pueda disponer del mismo traductor que trabajó en un documento anterior relacionado son escasas. La agencia puede haberle asignado ya otro proyecto.
Cuando un cliente trata con un profesional independiente, está seguro de que trabajará con la misma persona y obtendrá el mismo nivel de calidad, además de una mayor coherencia en la terminología y el estilo de la traducción.
Ventaja n°3: Reactividad
Un traductor independiente es a menudo más reactivo cuando se trata de realizar las cosas rápidamente. El proyecto se pone en marcha al instante sin necesidad de la aprobación de un administrador antes de poder empezar a trabajar.
Ventaja n°4: Economía
Por supuesto, las agencias suelen tener más recursos que un traductor independiente: personal, oficinas, etc. Pero tenga en cuenta que todo esto tiene un coste … que repercutirá en el precio final de la traducción.
Cuando una agencia de traducción le ofrece sus precios se garantiza, obviamente, obtener un margen de beneficios, por lo que para ello debe pagar una cantidad inferior a sus traductores.
Si consigue negociar un precio bajo con una agencia de traducción, sepa que los traductores cobrarán aun menos, y por lo tanto la calidad de la traducción puede verse afectada. Un traductor especializado y experimentado difícilmente aceptará un precio injusto e indebido.
Ventaja n°5: Relacional
Cuando se trabaja directamente con un traductor autónomo se crea una relación de confianza con la persona que se encarga de sus proyectos, lo que beneficia a ambas partes.
Usted obtiene una relación humana, incluso personalizada con su proveedor de traducciones, lo que le permite una mayor flexibilidad.
Si se realiza una colaboración a largo plazo, se pueden llegar a diferentes acuerdos que minimicen el coste de una traducción, por ejemplo al traducir documentos similares o que deban revisarse periódicamente, evitándose el pagar las analogías.
Desde la perspectiva del traductor independiente, gracias al trabajo realizado, éste consigue alcanzar un conocimiento profundo de las necesidades del cliente (campo de especialización, mercado, etc.) por lo que su trabajo será cada vez más pertinente.
Una buena relación con un cliente significa que éste podrá proponerle nuevos encargos y recomendar su trabajo.